El argentino Juan Jaime (31) es una de las figuras de Deportes Copiapó, cuadro que este lunes 4 de marzo recibe a Universidad de Chile en el Luis Valenzuela Hermosilla, por la fecha 3 del campeonato de Primera División.
El volante es el gran referente del conjunto nortino, estatus que se ganó a punta de su buen rendimiento y al tiempo no menor que lleva defendiendo la camiseta del León de Atacama, que son nada más ni nada menos que nueve.
En la previa del partido ante la U, Jaime atendió el llamado de En Cancha. En la oportinidad, recordó el momento complicado que pasó en su llegada al país, las ganas que tuvo de devolverse a Argentina por las condiciones que tenía en Copiapó y la actualidad del balompié nacional.
“Mi primera experiencia en Copiapó no fue tan buena. Cuando llegué, la ciudad se estaba reconstruyendo del aluvión del 2015. Llegué en 2017 y aún no teníamos estadio, ya que estaba tapado en barro. El club no tenía cancha, íbamos a entrenar a diferentes sectores, hacíamos de locales en Caldera y el césped era malísimo para el fútbol profesional. Fue difícil, tanto así que quería devolverme a Argentina”, comienza diciendo el formado en Lanús.
- ¿Por qué las ganas de devolverte?
- Vine a Chile con la ilusión de competir y crecer, pero en ese entonces veía que no existía esa ambición de parte de la institución. Después hubo un cambio de dirigencia y la situación cambió. Llegó Luis Galdames (presidente, trae a Erwin Durán como DT y desde ahí cambió la fisionomía de la institución. Se dio más identidad, se trajo jugadores y había intenciones de mejorar y crecer, cosa que yo buscaba tanto en lo personal como grupal.
- ¿Qué tanto les afectó la falta de estadio?
- Mucho. Incluso, cuando nos pasaron el estadio fue un punto de inflexión hasta hoy en día, ya que siempre será mejor hacer de local en nuestra ciudad y con nuestra gente. Además, el estadio de Copiapó tiene uno de los mejores sintéticos del país, pese al calor sofocante y la escasez de agua.
- Hace poco cumpliste 8 años en Copiapó y en el fútbol chileno. ¿Qué cambió para que decidieras quedarte?
- Fueron pasando los años y me fui acoplando a la ciudad y al club. No me di cuenta y ya llevo 8 años acá. Por suerte fue todo crecimiento. En 2019 estuvimos cerca de ascender, en 2020 quedamos afuera de la liguilla por pocos puntos, en 2021 estuvimos disputamos la Promoción con Huachipato y en 2022 se nos dio subir a Primera División. Hoy estoy sumamente contento, muy cómodo en la ciudad y en el equipo. No tengo nada que decir, ya que me tratan súper bien.
- ¿Para qué está Copiapó este año? Ivo Basay señaló que el objetivo es clasificar a Copa Sudamericana...
- Ivo Basay tiene una mentalidad de crecimiento, de tratar de ir por más. Nos armamos bien, hay jugadores importantes y de recorrido en el fútbol chileno. Yo, en lo personal, no me pongo barreras ni digo que vamos a ir por esto. Me preparo para siempre ser el mejor cada día, en cada partido y pelear en lo más alto.
- ¿Cuál es la clave para repuntar y tener un buen torneo?
- Tenemos que saber que de local nos tenemos que hacer fuertes, que tenemos una cancha difícil para los rivales, por lo que tenemos que sacar la mayor cantidad de puntos acá y luego de visita, ser inteligentes. Los chicos nuevos se están adaptando a lo que el profe quiere, él tiene una idea clara, es muy simple en sus palabras.
- ¿Qué opinión te has formado del fútbol chileno tras todos estos años en Chile?
- El fútbol chileno, técnicamente, es súper bueno, no hay que envidiarle nada a nadie. Lo que sí, en dinámica decae mucho. Estamos por abajo de las otras ligas de Sudamérica y eso se ve en los torneos internacionales, ya que la intensidad siempre marcará la diferencia.
Juan Jaime y sus inicios en el fútbol
- ¿Cuándo y por qué decides ser futbolista?
- Hasta los 14-15 años tuve como técnico a mi padre, él era el que me llevaba a la cancha y me entusiasmaba para que yo fuera futbolista, ya que él por diferentes motivos nunca pudo serlo. Me llenó de herramientas para vivir de esta hermosa carrera. Fue el primero en guiarme y alentarme.
- ¿Qué esfuerzo o sacrificio tuviste que pasar para llegar al fútbol?
- Yo me fui de mi casa a los 15 años porque me gustaba el fútbol, tenía esa ilusión de ser futbolista profesional pero nunca me imaginé por todos los esfuerzos y sacrificios que uno tiene que pasar. Te pierdes cumpleaños importantes, momentos con tu familia y amigos, situación que es difícil, sobre todo de chico. Si bien es una carrera súper bonita, tiene muchas cosas difíciles.
- ¿Qué tan difícil es estar lejos de la familia?
Yo tengo mi pareja que es copiapina. Estamos acá los dos y mi familia me viene a visitar cada dos o tres mes. Como mis padres están en Tucumán y yo en Copiapó, son ocho-nueve horas de trayecto, así que por lo menos estamos relativamente cerca. Gracias a Dios nos vemos varias veces al año.