Cristián Campestrini cumplió 45 años de edad el pasado martes y solo cinco días después jugó su primer partido.
Y no solo eso, sino que el arquero fue figura en el triunfo de la Universidad de Concepción por 1-0 sobre Copiapó por Primera B, atajando un penal en el último minuto del compromiso.
El triunfo no solo le sirve al Campanil para meterse en la pelea por la parte alta de la Liga de Ascenso, sino que también confirma su buen rendimiento, pese a ser el futbolista activo más longevo de Chile.

“Mi gran objetivo...”
Pese a que el registro tiene gran valor, sobre todo si se considera que aún están vigentes jugadores como Humberto Suazo (44) o Osvaldo González (40), Campe va por más y quiere ser el más viejo en la historia del fútbol chileno.
Para ello debe superar la marca dejada por el también portero Raúl Coloma hace más de cinco décadas. El seleccionado nacional alcanzó el récord tras jugar un partido oficial a los 46 años y 75 días el 22 de septiembre de 1974, en la victoria por 2-1 de Ferroviarios sobre Linares en la entonces Segunda División (hoy Primera B).
Pero eso no asusta a Campe, quien se propuso sobrepasar a Coloma. “Mi gran objetivo es llegar a los 47 años, es mi gran objetivo pasar al Conejo Pérez que estaba en México, así que ese es mi gran sueño. Seguiré trabajando, seguiré cuidándome día a día para poder llegar a ese objetivo”, señaló tras ser elegido como la figura del partido en el compromiso contra Copiapó.