“Los guardias sirven de poco y nada”: La mirada de Universidad Católica respecto a la violencia en los estadios

En San Carlos de Apoquindo reconocieron que la seguridad privada es contratada solo para cumplir con la exigencia, pero que se necesita avanzar en capacitación.

Hinchas de la UC Los hinchas de la UC le hicieron pasar varios dolores de cabeza al club en 2022. Foto: Agencia Aton.

La violencia en los estadios del fútbol chileno parece un tema de nunca acabar. Si bien, algunas largas pausas entre un hecho vandálico y otro hacen pensar que hay mejoras, la realidad es que el problema de fondo sigue estando más patente que nunca y el último Clásico Universitario entre el Club Universidad de Chile y la UC es prueba de ello.

En los “Cruzados” la situación preocupa y de sobremanera, sobre todo desde un 2022 nefasto, donde la barra brava dejó al equipo jugando varios partidos con tribunas castigadas por los constantes incidentes que protagonizaba.

Juan Tagle, presidente de Cruzados, abordó el tema en la Asamblea de Socios, donde respondió algunas inquietudes de manera virtual.

“Sin duda que el tema de la violencia en los estadios es la principal preocupación y problema que está afectando a nuestro fútbol con inusitada gravedad en los últimos años. En Universidad Católica nos preocupa evidentemente y tenemos nuestra propia realidad en temas de violencia”, partió reconociendo el mandamás.

“Como primer análisis, tenemos que entender que este fenómeno es algo que va más allá del fútbol, y por lo tanto tenemos que enfrentarlo de manera integral, global, y con una serie de medidas en lo inmediato que requieren del apoyo del Gobierno, del Estado y la policía”, prosiguió, detallando que ya se la ha planteado a la autoridad crear una base de datos nacional que podría estar basada en la información del Registro Civil.

Juan Tagle, presidente de Cruzados. Foto: Agencia Aton.
Juan Tagle, presidente de Cruzados. Foto: Agencia Aton.

Los guardias privados y su poca utilidad en el fútbol chileno

Además, Tagle reconoció que una debilidad de los clubes hoy en día está en la seguridad privada, pues no hay gente capacitada para reaccionar de manera adecuada cuando se producen hechos de violencia, siendo muchas de estos guardias personas de la tercera edad.

“Hay que avanzar mucho en lo que se refiere a mayor capacitación de los guardias privados, y hacer que ellos realmente cumplan una función y sean de utilidad, porque hoy por hoy todos somos testigos que los guardias, que es una exigencia que la autoridad pone a los clubes, sirven de muy poco o nada. Son un enorme gasto económico, que prácticamente no tiene utilidad alguna”, lanzó.

“Tenemos que avanzar con Carabineros para que nos ayude en la capacitación y en la búsqueda de guardias que realmente tengan las condiciones físicas y que puedan contar con elementos que puedan ser colaboración en este tema”, cerró.