Llegó en 2022 a la Universidad Católica como una verdadera apuesta y costó que se consolidara. Hoy ya es un inamovible en la oncena de Tiago Nunes y tan solo tiene 22 años.
Hablamos de Daniel González, que dejó Santiago Wanderers para recalar en San Carlos de Apoquindo y poco a poco ganarse un puesto, algo que vino a conseguir ahora de la mano del adiestrador brasileño.
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“Siento que durante el año fui de menos a más, tratando de encontrar mi mejor versión, aunque todavía pienso que tengo muchos detalles por mejorar. Mi meta es seguir consolidándome”, dijo hoy en conferencia de prensa, antes de revelar qué charla tuvo con el ex Athletico Paranaense para empezar a ser un habitual en la formación estelar.
“El profe me entregó una confianza que al principio no tenía. No estaba siendo citado, pero después me dijo que todo era en base a rendimiento. Conversamos y yo seguí entrenándome, buscando mi lugar en el equipo. Así se dio y lo he hecho de la mejor manera posible. Trato de aportarle mi granito de arena al equipo. Tengo que mantener ese nivel con mi compañero en el fondo. Eso es lo que me propuse desde un principio”, añadió el otrora jugador caturro.
Para cerrar, el Dani agradeció el apoyo de un futbolista en particular en Las Condes: “Mis compañeros me han ayudado mucho, pero uno en especial, que es el Keno (Eugenio) Mena, que ha estado en los momentos difíciles en cuanto a mentalidad. Siempre me ha mantenido firme, diciéndome que las oportunidades llegan y que me tienen que pillar preparado”.
La UC piensa en Cobreloa
Ahora, la UC deberá seguir entrenándose para llegar de la mejor forma posible a un duelo que es clave en la lucha por el Chile 3: ante Cobreloa en Calama. Ese compromiso está fijado para jugarse este sábado 2 de noviembre a contar de las 18:00 horas en el Estadio Zorros del Desierto.