Universidad Católica cerró el telón de esta temporada 2024, en donde los resultados no fueron los esperados. Una UC que comenzó con todo bajo el mando de Tiago Nunes, pero que con el pasar de las fechas se fue quedando, despidiéndose anticipadamente de la lucha por el título y perdiendo la primera chance de ir a Copa Libertadores.
Si hay en un punto en que todos los hinchas cruzados están de acuerdo es que el gran error de Nunes fue borrar a Thomas Gillier. El meta estaba siendo la figura del equipo cuando bajó el rendimiento, pero de la noche a la mañana el DT tomó la decisión de quitarle la titularidad.
El pecado de Tiago Nunes con Thomas Gillier
Fue en septiembre cuando Gillier perdió definitivamente el puesto. Apenas ocurrió, Tiago Nunes entregó la razón por la que optó por el Zanahoria: “Fue una opción personal. Para mí Gillier ha hecho las cosas muy bien, entrena de muy buena forma y tengo una buena competencia entre porteros. Me pareció que era el momento para que Sebastián pudiera jugar y mostrar su jerarquía”.
Desde que Nunes tomó esta decisión las estadísticas son lapidarias: perdieron cuatro partidos, empataron uno y solo ganaron dos. Para muchos este fue el punto de inflexión en Universidad Católica, el que terminó con el club dependiendo de otros para clasificar a la Copa Libertadores.
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Lo cierto es que la determinación de quitarle el arco a Thomas Gillier no solo tuvo que ver con algo futbolístico, sino que también con un tema contractual. Esto debido a que el meta finaliza contrato en junio de 2025 y el oriundo de Las Condes no tenía la intención de renovar con la institución.
Esto habría llevado a Tiago a borrarlo, esperando que su situación se regularizara lo antes posible, algo que no ocurrió y terminó con Gillier relegado a la banca en la recta final del Campeonato Nacional.