Es el segundo refuerzo de la Universidad Católica para 2025 y, de momento, el último. Los Cruzados sorprendieron con el fichaje de Jhojan Valencia, un volante colombiano proveniente del Austin FC de la MLS en Estados Unidos, que curiosamente tenía historia con nuestro país.
Resulta que el ahora jugador cruzado es hijo de Manuel Valencia -“el gran Manolo”, como lo llama Jhojan-, un defensor que vistió las camisetas de Provincial Osorno y Huachipato, pero que principalmente es recordado con cariño en Valparaíso, donde brilló en el recordado Santiago Wanderers campeón de 2001.
“Cuando le conté a mi papá que acá en Chile todavía lo recordaban por lo hecho en Wanderers, fue toda una sorpresa. Se sentía muy orgulloso al saber que acá se hablaba de él. A mí, como hijo, también me gustó saber que había dejado muy bien puesto su nombre en el país”, le dice el volante a En Cancha, que hace memoria para traer a su cabeza imágenes de Chile por allá en los 2000.
“Yo viví en Viña del Mar y en Concepción. Estaba muy pequeño, unos 5 años más menos. No me preguntes si me acuerdo, porque tengo recuerdos fugaces como se dice, ja”, complementa.
-¿Cómo se dio esta chance de recalar en el fútbol chileno?
-Al principio, cuando se dio la posibilidad, no me entusiasmé tanto porque era solamente un sondeo, nada serio. Yo pensé que habían preguntado y listo, pero después, con el correr de los días, ya me empezó a hablar el gerente deportivo (José María Buljubasich), el profe (Tiago Nunes) tenía muchas ganas de hablarme también, y ese interés le agrada al jugador. Ahí empecé a analizar seriamente la opción y era algo muy conveniente para mí.
-¿Y qué tal estos días?
-Me he sentido bien, muy contento por mi llegada a Santiago y la Universidad Católica. Todo el mundo se ha portado muy bien conmigo en el club.
-¿Muy exigente Tiago Nunes? Hace rato que están entrenando en doble turno...
-Sí, claro, pero está bien esa exigencia. El profe exige y una pretemporada así es la que nos va a poner en buena forma para todos los torneos que tendremos esta temporada.
-Y el calor ha estado horrible las últimas semanas...
-No, yo estoy súper bien. Este clima es muy similar al de Colombia. Está perfecto para mí.
-En invierno los colombianos sufren en Santiago.
-Me han contado que son duros los inviernos acá, pero estoy acostumbrado. En Austin, por ejemplo, también llegábamos a los -2 o -3, así que estoy cubierto en ese sentido. A los colombianos les pega duro el frío, pero ya estoy algo más acostumbrado.
-¿Ya hablaste de fútbol con Tiago? ¿Qué es lo que te pide?
-Sí, antes de mi llegada sobre todo. Ahí charlamos y me contó qué es lo que pretendía, lo que quiere para este año. Me dijo que buscaba en mí un jugador que le ayude con la salida desde el fondo y que al mismo tiempo sea un tapón en el mediocampo, que le ayude a recuperar balones y desde esa zona empezar a distribuir el juego.
-¿Y cómo ves la competencia con jugadores como Alfred Canales, Agustín Farías o Fernando Zuqui?
-Todos muy buenos y de buen pie sobre todo. Tienen un gran nivel y la competencia es altísima, pero sana, que es lo positivo. El grupo en general es muy sano y eso me gusta. Luego será el profe el que tome la decisión de quién juega.
-Me imagino que te han contado, pero la UC no tiene buenas experiencias con los colombianos. La mayoría no ha rendido. ¿Es eso una presión para ti?
-Más que presión, es una motivación. Siento esa responsabilidad de dejar bien puesto el nombre de los colombianos en Chile y más en un club como la Universidad Católica. Ojalá hacer las cosas bien para que las puertas se le abran a muchos más futbolistas de Colombia.
Chile mejor que la MLS y la ventaja del Claro Arena
-Cuando fuiste presentado en San Carlos de Apoquindo dijiste que el fútbol chileno es más competitivo que la MLS y varios quedamos bien pensativos. ¿Es así?
-Sí, lo dije y lo sostengo. Es una de las cosas que me hizo firmar aquí en Chile. Sabemos que el fútbol sudamericano tiene un nivel más alto que la MLS, más allá que en Estados Unidos haya jugadores de mucho renombre que elevan el nivel de la liga. Pero lo cierto es que allá no se siente la presión de jugar un torneo internacional, por ejemplo. No existe la exigencia que te presenta una Copa Libertadores o una Sudamericana. Si aquí juega un club chileno contra uno brasileño, ninguno de los dos piensa que la tiene fácil. Creo que no me voy mucho de la realidad con lo que digo.
-¿Cuál sería la diferencia entre la MLS y el fútbol que se juega acá?
-Es que falta esa técnica sudamericana allá. En Estados Unidos le dan mucho valor al aspecto físico, que está muy bien, pero acá somos más tácticos, más pensantes, y obviamente todo eso acompañado con una pasión que solo se vive acá.
-¿Cuánta ilusión les hace saber que en algunos meses van a tener un estadio nuevo, como el Claro Arena, para tratar de hacerse fuertes como locales?
-Aún no he tenido la oportunidad de entrar, pero de afuera se ve imponente. Tenemos que aprovecharlo, tiene que ser una motivación extra, tratar de sacar ventaja con la presión cuando juguemos los partidos en casa.
-Y el césped será sintético, de esos de alta tecnología, híbrido como le llaman. ¿Te tocó jugar en canchas así en Estados Unidos?
-Sí, hay un par de estadios con ese pasto sintético y la verdad es que siempre nos fue bien en esas superficies. Ojalá que acá se repita la historia, ja.
-¿Y al futbolista le gusta ese tipo de pasto?
-En lo personal, yo siempre prefiero el natural, pero lo cierto es que ese tipo de pasto no es que dañe el fútbol o que lo haga verse de una manera diferente, como muchos piensan.
-Se viene la Serie Río de La Plata, con partidos contra Unión de Santa Fe y Atlético Tucumán. ¿Buenos apretones?
-Sí, por supuesto. Esos partidos sirven muchísimo para ponernos a punto, para medir fuerzas, para ver qué tal estamos. El roce con equipos argentinos ayudará muchísimo para ver en qué pie estamos de cara a la temporada. Nos va a servir mucho para agarrar confianza, porque la idea es llegar de buena manera al inicio del Campeonato Nacional.
-¿Ya han pensado en ese partido único por Copa Sudamericana ante Palestino? Es algo ingrato, porque tienes una mala noche y te quedas fuera.
-Yo creo que si llegamos bien a ese partido, bien preparados física y futbolísticamente, no deberíamos sufrir ni tener problemas en pasar de ronda. Ya sea partido único o no, depende de nosotros estar concentrados y hacerlo de la mejor manera.
-La última. ¿Qué te ha sorprendido de Chile?
-La forma de hablar puede ser, ja. Hay palabras similares, pero otras que de verdad no entiendo nada. En el camerino hablan muy rápido. Pero, bueno, por suerte la mayoría de lo que se habla es de fútbol, entonces no me pierdo tanto, ja. De a poco iré entendiendo más a mis compañeros. Lo positivo es que todos han sido muy amables, se ve que son buenas personas. Con Zuqui converso mucho, principalmente porque jugamos en la misma posición, y ahí compartimos varias cosas, pero todos me han recibido de la mejor manera.