Durísima fue la eliminación de la Universidad Católica de forma temprana en Copa Sudamericana, a manos de un Palestino que estuvo más preciso en la tanda de penales.
Los Cruzados, por tercer año consecutivo, se quedaron sin acceder a la fase de grupos del segundo torneo más importante de la región, aunque dentro del plantel descartan de plano que haya sido un golpe de nocaut en esta temporada.
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“La palabra crisis es muy fuerte. Nosotros, al menos, no nos sentimos para nada en una crisis. Todo lo que se habla en el exterior nosotros, la verdad, no lo estamos pescando”, dijo hoy Tomás Asta-Buruaga en conferencia de prensa en la precordillera.
“Tercer año donde no se puede avanzar en un torneo internacional, pero el fútbol es así. Obviamente estamos dolidos, pero tenemos que dar vuelta la página. Somos un equipo grande y hay que pelear arriba. ¿Autocrítica? Sí, estamos al debe”, agregó el defensor.
Y cerró: “Estamos muy fuertes como grupo, como equipo e institución. Tenemos claros los objetivos, que ahora son Campeonato Nacional y Copa Chile”.
La UC y un nuevo desafío
La Universidad Católica tratará de lavar sus heridas, ahora en la Liga de Primera, donde hay revancha a la vuelta de la esquina, ya que este sábado 8 de agosto se dejará caer en Chillán para medir fuerzas ante Ñublense en el Nelson Oyarzún, a contar de las 18:00 horas.
