En los últimos años se ha vivido una verdadera danza de entrenadores en Universidad de Chile, principalmente por la ausencia de resultados deportivos, los que recien encontraron este año de la mano de Gustavo Álvarez.
Uno de los técnicos que peleó el descenso con la U fue Rafael Dudamel, que llegó a Chile en 2020 para intentar salvar a los azules de la Tabla Ponderada. El venezolano logró su cometido, pero fue despedido por malos resultados en el Campeonato 2021. Ahora, dejó la actividad por razones familiares.
Dudamel dejó su cargo en Colombia
El venezolano, que este año logró una hazaña en Colombia sacando campeón al Atlético Bucaramanga después de 75 años de sequía, decidió ponerle fin a su paso por tierras cafeteras, y de paso, a la dirección técnica.
En conferencia de prensa, Dudamel reveló sus razones. “Manifestarle a toda la ciudad, al mundo del fútbol que el único motivo es una decisión familiar, he querido cerrar y limpiar cualquier tipo de especulaciones, nada que tenga que ver con lo contractual, con la llegada o salida de jugadores, quiero cancelar esas especulaciones”, afirmó.
“Ha sido un ciclo inolvidable, fantástico, desde ya quiero decirle a la hinchada, a Santander, gracias, ya les extraño, han sido 12 meses en los que hemos trabajado con mucha dedicación, con mucha ilusión, fue un trabajo que fluyó y al final de todo nos llevó a alcanzar tan anhelado título que luego de 75 años se logró, Dios me dio el privilegio de tan anhelado sueño”, complementó.
La emoción de Dudamel
Entre lagrimas, el exarquero explicó la necesidad de estar junto a su familia. “Hoy doy por terminado este ciclo, para disfrutar de mi familia, he querido pedirle a mi esposa que me acompañe porque ha sido un año muy difícil desde lo familiar, por no estar cerca de mis tres hijos y mi esposa”, detalló.
“Mi hijo pequeño hasta hace poco me dijo, ‘papá, me voy con el corazón cargado de emociones’, pero hay un lado de mi vida que está requiriendo ese amor familiar y ellos están necesitando al papá y al esposo en la casa”, reveló.
Por último, le dedicó unas palabras a su familia. “A mi esposa, gracias por esperarme, por amarme, por tenerme paciencia, porque a pesar de no haberlos tenido cerca cada día de trabajo siempre estuviste con cada oración, perdóname por todo este tiempo ausente, que Dios me de vida para poder recompensar todo tu apoyo”, concluyó.