Este fin de semana comenzará el Campeonato Nacional. Para el debut, Universidad de Chile llega con siete refuerzos y todas las necesidades solicitadas por Gustavo Álvarez cubiertas.
En materia de incorporaciones, la U ya tiene la tarea hecha y Lucas Di Yorio fue su último refuerzo, pero a falta de un mes para el cierre del mercado de fichajes, en la dirigencia estudiantil planifican movimientos de última hora.
Las tareas pendientes en el mercado de la U
Las últimas tratativas que se toman las oficinas estudiantiles son en materia de salidas, donde se avizoran negociaciones que podrían resolverse en los próximos días.
Uno de los nombres involucrados es Ignacio Sáez, quien se encuentra en el Sudamericano Sub-20 con La Roja. El portero podría salir cedido un año más a la Primera B en busca de experiencia. Su situación debería resolverse la próxima semana, cuando retorne al país.
Por otra parte, Renato Huerta y Bianneider Tamayo también esperan por su destino. Ambos jugadores entrenan con el club, pero no están considerados por Álvarez, por lo que se espera que salgan a préstamo pronto.
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Formiliano se queda
Uno de los jugadores que proyectaba su salida era Fabricio Formiliano. El uruguayo fue varias veces marginado de la convocatoria, y solicitó revisar su situación para buscar una eventual salida que le conveniera al club, que en ese momento necesitaba cupo de extranjero.
La oferta por Emmanuel Ojeda cambió todo el panorama. El charrúa garantizó su estadía, y le torció la mano a Gustavo Álvarez, quien lo ha considerado durante los partidos de Copa Chile.
Al menos durante el primer semestre, la estadía de Formiliano en la U está garantizada. Ahora, habrá que ver el protagonismo que tendrá durante los primeros meses del año para saber si buscará salir a mitad de temporada.
