César Díaz dejó grabado su nombre en el inconsciente colectivo de los seguidores del fútbol chileno. El atacante realizó una notable carrera que incluyó pasos destacados por Cobreloa, Temuco y Cobresal.
Aunque durante su trayectoria fue reconocido por ser uno de los delanteros más implacables de Chile, nunca tuvo la oportunidad de saltar a un equipo grande. En conversación con En Cancha, reconoció que su gran deuda fue jugar en el club de sus amores: Universidad de Chile.
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César Díaz y su sueño de jugar en la U
Díaz, que se retiró en 2011 vistiendo la camiseta de Deportes Antofagasta, admite: “Esa es la gran espina clavada de mi carrera, no haber podido llegar al club del que fui hincha toda mi vida, la U”.
Pese a que confiesa su pasión por la U, recordó que siempre cumplió en sus enfrentamientos. “De hecho, es el equipo al que más goles le hice en mi carrera. Con todas las camisetas que vestí me tocó anotarles”, asumió.
“Siempre fui de la U, pero cuando defendía a otros equipos me olvidaba. En ese momento me preocupaba de ser profesional, y ya después el lunes veía los goles, me ponía al tanto del momento del club, pero al jugar no me importaba”, complementó.
Una pasión que se hereda
Aunque Díaz nunca jugó en Universidad de Chile, sus hijos heredaron la pasión por el club. “Siempre me gustó la U, siempre fui hincha. Ahora mis hijos son fanáticos del club”, comentó.
De hecho, aunque no lo vieron con la camiseta azul, recurrentemente asisten al Estadio Nacional. “Yo no soy mucho de ir al estadio en general, pero cuando tengo la posibilidad de ir, voy. Mis hijos van siempre, les encanta”, concluyó.
