Entró del banco, vacunó a la Universidad Católica en el último suspiro y puso a todo el Estadio Nacional a festejar un nuevo triunfo de Universidad de Chile en el Clásico Universitario, esta vez el número 200 de la historia.
Es Rodrigo Contreras, delantero que ha debido esperar su oportunidad desde el banco esta temporada, debido a que Gustavo Álvarez siempre se ha inclinado por Nicolás Guerra y Lucas Di Yorio.
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Pese a ese panorama, el Tucu no ha bajado los brazos y ayer obtuvo su premio. Sin embargo, detrás de la felicidad por ser el héroe azul ante los Cruzados también hay una gran tristeza, algo que el mismo delantero se encargó de revelar.

El dolor de Rodrigo Contreras en la U
“Para mí es muy difícil lo que estoy viviendo. Estoy lejos de mi hijo, que vive en Buenos Aires, pero él me da fuerza para seguir trabajando... Cuando uno vive lejos, la distancia hace todo más complicado y este gol refleja lo que vengo haciendo para ellos y esto es para ellos, mi familia, porque siempre están en las buenas y en las malas”, dijo el atacante en conversación con TNT Sports.
“No fue fácil, pero trabajo día a día para seguir aprendiendo y estar preparado para jugar 10 o 90 minutos, porque para mi ayudar al equipo es lo más importante”, remató Contreras.
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¿Cuándo vuelve a jugar Universidad de Chile?
Ahora la U se olvidará un rato del Campeonato Nacional, para enfocar su mirada en Copa Libertadores. Los dirigidos de Gustavo Álvarez afrontan la Fecha 4 del torneo más importante de América, la que los hará recibir a Estudiantes de La Plata este miércoles 7 de mayo, otra vez en el Estadio Nacional, a contar de las 20:00 horas.