Universidad de Chile ya comienza a delinear su plantel para la segunda parte de la temporada 2025. Eliminados de la Copa Chile y aún con dos fechas por disputar en el Campeonato Nacional antes del receso, los azules proyectan un mercado invernal en el que podrán realizar hasta tres incorporaciones.
Pero para eso, primero deberán liberar espacio. Y el primer nombre en la lista de posibles salidas es el del defensor Fabricio Formiliano. El zaguero uruguayo de 32 años tiene contrato vigente y llegó como pedido expreso de Gustavo Álvarez en agosto del año pasado.
Sin embargo, el rendimiento del charrúa nunca estuvo a la altura de las expectativas: apenas ha jugado seis partidos en 2025, no ha sumado minutos en el último mes y ni siquiera aparece como alternativa en las convocatorias.
Formiliano, descartado en la U
Esta situación ha llevado a la dirigencia a buscar fórmulas para destrabar su salida antes del cierre de la primera rueda. El objetivo es claro: liberar un cupo de extranjero, lo que permitiría abrir espacio para nuevos refuerzos.
Formiliano arribó a la U con el cartel de ser un zaguero experimentado, con pasos por Peñarol, San Lorenzo y Necaxa, y con recorrido internacional. De hecho, su fichaje fue aprobado directamente por Álvarez. Pero desde su llegada al Centro Deportivo Azul, su impacto ha sido mínimo.
Ya en su primer semestre alternó sin ser titular, y para este 2025 fue claramente relegado. El buen nivel de la dupla Matías Zaldivia–Franco Calderón, sumada a la llegada de Nicolás Ramírez como opción natural de recambio, lo dejó completamente fuera del radar.

Los problemas que desata Formiliano
Internamente, su bajo nivel también ha generado ruido. No son pocos los que consideran que su llegada fue un error de planificación, ya que utiliza uno de los seis cupos de extranjeros y no es considerado.
De hecho, su caso es uno de los primeros que se analiza en la reestructuración del plantel de cara al segundo semestre. En la U ya no hay espacio para el uruguayo en el plantel.
A esto se suma otro detalle relevante: en caso de confirmar su salida, Universidad de Chile perdería a su cuarto/quinto central natural, un escenario complejo considerando que actualmente ya hay preocupación por las lesiones en esa zona.
Una decisión que condiciona el mercado de la U
El principal dilema que genera el caso de Formiliano no es solo su bajo aporte, sino lo que implica en la estrategia de fichajes. Con tres refuerzos disponibles para el mercado invernal, la U no tiene en sus planes incorporar un defensa central.
Por lo tanto, liberar a Formiliano supondría abrir un nuevo problema: habría que buscar un reemplazante, pero sin sacrificar los tres cupos principales.
¿La solución? Podría estar en la opción reglamentaria de abrir un cuarto cupo si el club logra vender a un jugador por más de 250 mil dólares. Sin embargo, en el caso del uruguayo se maneja una salida en condición de libre, lo que no permitiría acceder a ese beneficio.
Así, la U deberá decidir entre priorizar la liberación del cupo de extranjero o mantenerlo como alternativa ante una emergencia defensiva.
Mientras tanto, desde el entorno del jugador se trabaja en un final anticipado del contrato, que tiene vigencia hasta finales de año. El objetivo sería alcanzar un acuerdo económico que permita su salida sin mayores trabas, algo que el propio futbolista vería con buenos ojos considerando su escasa participación.
Por ahora, en el CDA todo está en revisión. Universidad de Chile se prepara para un segundo semestre exigente, donde deberá enfrentar el Campeonato Nacional y los Playoffs de la Copa Sudamericana ante Guaraní. Por ahora, los focos están puestos en el duelo ante Coquimbo de este domingo a partir de las 15:00 horas.