Hace varias semanas que los jugadores de las ligas europeas han dado luces de una posible huelga por el extenso calendario de partidos que deben jugar por temporada, y en esta ocasión las Ligas Europeas unieron fuerzas con la FIFPro (Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales) para presentar una queja contra la FIFA ante la Comisión Europea.
“Nuestra causa ante la Comisión Europea es clara: la FIFA está abusando de su poder para dictar el calendario internacional de partidos y expandir sus propias competiciones, y de esa manera aumentar sus propios ingresos”, dijo David Terrier, presidente de la FIFPro durante una conferencia de prensa realizada hoy en Bruselas para presentar los argumentos del caso.
En Bruselas, los ejecutivos de las partes demandantes resaltaron el conflicto de intereses que supone el doble rol que tiene la FIFA, como organismo rector y organizador de competiciones. “La FIFA está fallando en su mandato como regulador mundial, al explotar el calendario de partidos internacionales para sus propios intereses comerciales”, continuó Terrier.
Sobrecarga de partidos: el principal conflicto
“La FIFA se rehúsa a escuchar y ponerse en sintonía con los jugadores, el principal recurso laboral de nuestra industria, quienes salen a la cancha, potenciando la cultura global y europea del entretenimiento, y presionando sus cuerpos hasta el límite”, argumentó el mandamás de la FIFPro.
“Pero nosotros sí escuchábamos a nuestros jugadores, hemos recibido los mismos mensajes por un largo período de tiempo, que han estado jugando mucho y no tienen el tiempo suficiente para recuperarse. Con la peor temporada de la historia adelante en cuanto a carga de partidos se refiere, muchos jugadores han decidido hablar públicamente con el mismo mensaje: ya es suficiente”, dijeron en directa relación a los cambios de formatos de las competencias europeas, que ahora tendrán una mayor cantidad de duelos, como también el Mundial de Clubes 2025 y la Copa del Mundo 2026.
“Es tiempo de un nuevo arreglo en el fútbol europeo, donde los jugadores y ligas tengan los mismos derechos que los inversionistas de otras industrias. Estamos pidiéndole a la FIFA que respete los principios básicos de la Unión Europea, tales como el derecho a la libre y justa competencia, el derecho a la salud y seguridad en el lugar de trabajo, y el derecho a los acuerdos colectivos. Esperamos que esta acción legal nos guiará hacia un futuro más sano para el fútbol europeo”, cerró el argumento de la FIFPro.