En Barcelona se viven días intensos. Este sábado la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y LaLiga reafirmaron la desafiliación de Dani Olmo y Pau Víctor como jugadores del primer equipo.
A pesar de las esperanzas que entregó la venta millonaria de palcos VIP del futuro Camp Nou, el procedimiento llegó fuera del plazo establecido. Según informa LaLiga y la RFEF, ambos jugadores han sido desafectados, ya que el club catalán no presentó “ninguna alternativa que, atendiendo al cumplimiento de la normativa de control económico de LaLiga, le permitiese inscribir a ningún jugador a partir del próximo 2 de enero”.
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El Barcelona se queda sin dos jugadores considerados por Hansi Flick. Pau Víctor estaba realizando su primera temporada con el primer equipo y ya fue contactado por el Real Betis que quiere aprovechar su fichaje a costo cero.
Sin duda lo que deja peor parado a Laporta y compañía, es dejar partir a Dani Olmo. Los blaugranas pagaron 60 millones de euros por él y terminará marchándose libre en menos de un año.
El jugador español queda automáticamente como jugador libre, pese a que tenga contrato hasta junio de 2030, tiene estipulada una cláusula que le permitía salir a coste cero y cobrando una indemnización si es que los culés no lograban inscribirlo.
Con este acontecimiento, Joan Laporta queda en la cuerda floja. Sigue sumando detractores que exigen su salida, y se encuentra al borde de la dimisión o la moción de censura.
