¿El Manchester City está en crisis? Suena exagerado, considerando que marchan segundos en la Premier League y no ha quedado eliminado en la Champions, pero sin duda que la goleada sufrida este sábado ante el Tottenham como local ha desatado un remezón en el club, como no se veía desde que Pep Guardiola llegó como entrenador.
El DT catalán renovó esta semana por dos temporadas más, poniendo fin a los rumores de una posible salida, pero su continuidad se aseguró justo en el peor momento del equipo... al menos para los estándares a los que estaban acostumbrados.
Una derrota histórica para el City y Guardiola
Con la amenaza seria de sufrir un castigo histórico y descender por no cumplir con las reglas del Fair-Play Financiero, Manchester City está pasando por su temporada más difícil en varios años, y que quedó expuesta con la goleada sufrida ayer ante Tottenham.
De partida, el 4-0 en contra es la peor derrota del City en el Ettihad Stadium, un recinto en el que no perdían desde noviembre de 2022, 742 días atrás. Para Guardiola es además su caída más estrepitosa como entrenador, igualando resultados similares que ya había sufrido con el Barcelona y Bayern Múnich.
Además, es la primera vez que Pep pierde cinco partidos consecutivos en su carrera, una racha que se extiende en todas las competencias y que partió justamente con el Tottenham, que los eliminó en la Copa de la Liga por 2-1. Luego se cayó en la Premier ante Bournemouth, Brighton y los mismos Spurs, con un 4-1 sufrido en Portugal ante Sporting Lisboa entremedio.
Nunca un campeón vigente de la Premier había sufrido esta racha en contra, que el City no vivía desde 2006, la época previa a la llegada de los jeques que cambiaron su historia. Y los sueños de un tetracampeonato podrían quedar casi sepultados hoy mismo, ya que el Liverpool les lleva cinco puntos de ventaja y se mide al colista, el Southampton de Ben Brereton.
¿Algunas coincidencias de esta mala racha? Rodri, el actual Balón de Oro, no ha jugado por la lesión que podría hacerle perder toda la temporada, y a Erling Haaland se le secó la pólvora, con apenas un gol.