Histórica marca de autos británica presenta su nuevo logo

Hoy marca el comienzo de una nueva era para Jaguar, una firma que, tras más de 100 años de historia, se estrena nuevo logo y se reinventa por completo para recuperar su esencia original y proyectarse hacia el futuro con una identidad visual que promete sorprender al mundo.

La transformación total de Jaguar no solo se centra en la modernización de sus vehículos, sino también en una renovación profunda de su marca y filosofía.

La clave de esta reinvención radica en un concepto fundamental de la marca: “copy nothing” (no copiar nada). Un principio que data de su fundador, Sir William Lyons, quien siempre defendió que un Jaguar nunca debía imitar a otros.

En palabras de Gerry McGovern, Chief Creative Officer de Jaguar: “Jaguar sienta sus bases en la originalidad. Nuestro fundador creía que ‘un Jaguar no debía copiar nada de nadie’ y esa filosofía sigue viva hoy”.

El movimiento artístico del modernismo exuberante es el motor de esta renovación. Este estilo, que promueve el diseño atrevido y las ideas originales e inesperadas, es el reflejo de un Jaguar más audaz e intrépido. Este enfoque creativo se traslada a todos los componentes de la marca, desde su identidad visual hasta la arquitectura de sus productos, ofreciendo un carácter único que captura la imaginación.

La visión de Jaguar, según McGovern, es clara: “Estamos creando el Jaguar del futuro, con la intención de recuperar su estatus como una marca que enriquece las vidas de sus clientes e impulsa la comunidad Jaguar”. Un futuro donde la originalidad y la audacia siguen siendo los pilares fundamentales de su propuesta.

A partir de hoy, Jaguar presenta su nueva identidad visual, una que refleja sus valores y la esencia de lo que está por venir. Cada uno de los cuatro símbolos del cambio constituye una pieza clave en esta evolución, y a través de ellos, la marca demuestra su compromiso con la innovación y el arte.

La nueva marca figurativa de Jaguar es la firma que define la empresa en su totalidad. Combinando formas geométricas, simetría y simplicidad, rinde homenaje al modernismo mientras establece un equilibrio visual entre mayúsculas y minúsculas. Este diseño está pensado para sorprender y capturar la atención, consolidándose como un símbolo visual fácil de reconocer y asociado a la elegancia y la modernidad.

El tachado es otro elemento clave en esta renovación. Esta línea gráfica, que atraviesa la imagen de la marca, no solo destaca por su simplicidad y fuerza visual, sino también por su simbolismo. El tachado es un rechazo a la imitación y a lo común, representando la decisión de Jaguar de desmarcarse de las tendencias y apostar por lo auténtico y lo exclusivo.

El uso de colores vivos y exuberantes es otro pilar de la nueva identidad de Jaguar. Los colores primarios como el amarillo, rojo y azul se incorporan con texturas y movimiento, evocando la conexión de la marca con el mundo del arte. Estos colores no solo representan la vitalidad de Jaguar, sino también su conexión emocional con los clientes y su capacidad para sorprender.

Por último, el emblema del jaguar, reinterpretado en esta nueva etapa, sigue siendo el símbolo de excelencia y liderazgo de la marca. Este distintivo, que muestra al jaguar saltando hacia adelante, simboliza el espíritu de la marca: innovación, progreso y perseverancia. El monograma de Jaguar es ahora también un adorno, un detalle final que resalta la artesanía y calidad detrás de cada uno de sus vehículos.

Como se ve, la nueva identidad de marca de Jaguar es mucho más que un cambio de logotipo. Representa una transformación profunda que se manifiesta en cada aspecto de la marca: desde su comunicación visual hasta la forma en que se relaciona con sus clientes.

Con esta renovada visión, Jaguar no solo busca enamorar a los nuevos consumidores, sino también reconectar con aquellos que alguna vez se sintieron atraídos por su espíritu rebelde y su estilo único.