Oklahoma City Thunder sigue confirmándose como uno de los mejores equipos de la NBA y la noche de este jueves derrotó a Indiana Pacers por 120 a 114. Shai Gilgeous-Alexander, con 45 puntos, una vez más fue la gran figura del equipo, aunque el partido quedará marcado por lo que ocurrió en el último cuarto.
Comenzaba el período final cuando el base de OKC Ajay Mitchell tomó la pelota para empezar el ataque de su ataque... cuando de repente se devolvió a su propia canasta y anotó una bandeja.
¿Autogol? El coach del Thunder Mark Daigneault ciertamente quedó marcando ocupado, hasta que comprendió la situación: los árbitros se habían equivocado y no invirtieron las zonas de la cancha, por lo que Mitchell, en un acto de mucha astucia, decidió darle dos puntos a su equipo sin oposición.
Al final la canasta no valió -había pasado la mitad de la cancha, por lo que era violación al defenderse- pero sin duda que lo ocurrido anoche en la NBA quedará en la lista de los grandes bloopers de este 2024.