Jimmy Butler es una de las grandes figuras de la NBA, pero esta temporada está teniendo un año para el olvido. En los 22 partidos que ha jugado hasta ahora con Miami Heat, apenas promedia 17 puntos, muy poco para sus estándares.
¿La razón? Perdió la alegría de jugar. El escolta-alero, de hecho, pidió formalmente ser traspasado, tras una larga saga de desecuentros con la dirigencia, que comenzó con una negativa de extenderle su contrato y mejorarle el sueldo.
“Quiero volver a ser dominante, quiero jugar al baloncesto y quiero ayudar a este equipo a ganar, y ahora mismo no lo estoy haciendo”, señaló Butler anoche, tras la derrota de Miami ante Indiana Pacers, en la que apenas marcó 9 puntos.
Según ESPN, el seis veces All-Star no tiene un destino predilecto, pero sí aspira a llegar a algún contendiente al título. Phoenix Suns, Dallas Mavericks, Golden State Warriors y Houston Rockets serían los equipos más interesados en ficharlo, aunque cada uno tendrá que negociar primero al Heat con un traspaso que logre convencerlos.