- “Acá en Argentina nadie te regala nada, porque inclusive los chicos que suben de cuarta o reserva te comen crudo. Entonces a los que vienen con la mentalidad de que es difícil competir, no les va a ir bien”.
A Luciano Aued le llama la atención que en Chile muchas veces se diga que el futbolista nacional no puede competir a nivel internacional, cuando técnicamente el jugador sí tiene calidad. En tal sentido, no le sorprende que la nueva camada que ha llegado a Argentina esté cumpliendo muy buena campaña en lo global.
-¿Tienes alguna explicación al fenómeno de los chilenos en el fútbol argentino? Fenómeno que, salvo ocasiones puntuales, de buenos rendimientos, no.
No sé si hay una explicación. Está muy bueno que vengan y lo hagan de esta manera. Esta semana (Pablo) Galdames en Independiente hizo dos goles en la Sudamericana y eso que no está jugando de titular en la liga. Es bueno destrabar ese mito de que el futbolista chileno no puede competir a nivel internacional. A veces en el medio chileno lo escuché, como que se menosprecia lo del país propio. Es muy difícil competir a nivel internacional y que a Argentina vengan chilenos y lo hagan de la manera que lo hacen. Le hace bien al fútbol chileno y sobre todo a la Selección que tanto lo necesita. No hay que mirarse en menos, sino todo lo contrario. Acá en Argentina nadie te regala nada, porque inclusive los chicos que suben de cuarta o reserva te comen crudo. Entonces a los que vienen con la mentalidad de que es difícil competir, no les va a ir bien. El que llega preparado, asume un proceso de cuidado, de hacer gimnasio, de tener buena alimentación, y se adapta rápido y saca una diferencia, porque técnicamente los futbolistas chilenos son buenos.
-¿Por qué le está costando tanto a Gonzalo Tapia en River? Porque tu lo conoces y él es un futbolista joven que cumple de alguna manera las características de mentalidad positiva.
Con Gonzalo también tengo una muy buena relación. Compartimos muchísimo cuando empezó y en Católica hizo goles importantes cuando yo estuve. Ahora que llegó a River, charlé con él, lo felicité. Es normal que cueste llegar a un club enorme, tener otra exigencia, otra competencia, de jugar ante 90 mil personas. Para todos es difícil. Figuras que han venido y han sido llamadas a ser estrellas, les ha costado un mundo. River debe ser grandísimo, ¿eh? Yo estuve en un club gigante como es Racing y los primeros años a mí también me costaron y me fueron difíciles. Hay que tener personalidad, rebeldía, eso de decir ‘si estoy acá es por algo’, ‘si me compraron, si me llamaron, es porque creen en mí‘. Cuando hacés un clic, todo mejora, pero hasta llegar a ese clic pasan estas cosas, muchos altibajos y te empezás a cuestionar vos mismo. En algún momento va a explotar, porque tiene condiciones de sobra, físicamente es muy bueno, hace goles. Creo que tiene muy buena gente alrededor y ojalá que lo ayuden a superar este proceso lo mejor posible. También de pronto está bueno que te golpeen para que empiece a formar un poco de callos, ¿eh? Y a partir de ahí, me parece que va a explotar. Y no tiene techo, porque Gonzalo es un jugador bárbaro.

-¿Si tuvieras que darle un consejo, qué le dirías: que aguante en la banca o que se vaya a préstamo a recuperar confianza para volver?
Nooo, la tiene que bancar... A mí me pasó en Racing. Los primeros dos años, con el Cholo Simeone de técnico, jugué bastante. Y después, me costó muchísimo. Y bueno, un día, entre tantas cosas que pasaron, Pablito Lugüercio, a quien tenía de compañero, me dijo ‘que te echen de Racing, pero de acá no la entregués así tan fácil, renunciando. Si te echan, tenés tiempo para que irte a otro lado’. Seguí intentando, seguí luchando y tuve mi recompensa. A mí me parece que para bajar tenés tiempo. Creo que Gonzalo está entre los dos o tres mejores equipo de Argentina y de Sudamérica. Entonces, ¿para qué ir para abajo? La tiene que pelear, llegó hace muy poquito también. Es otra realidad en un proceso nuevo. Me parece que él todo eso lo sabe, pero bueno, a veces no es fácil. Uno quiere todo ya, y me parece que lleva una construcción, lleva tiempo... pero él lo va a lograr.
-¿Qué lectura hace de todo lo que le está pasando a Ricardo Gareca en Chile?
Chile está en un proceso de cambio, un recambio importante de jugadores que han salido y que hoy están compitiendo a nivel internacional. Ese proceso le va a venir muy bien a la Selección Chilena. Eso es lo primero. Ojalá lo puedan aguantar a Gareca, creo que es un técnico muy capacitado, un técnico al que se lo eligió por lo que ha hecho a lo largo de toda su carrera. Soy de la idea de que los procesos hay que sostenerlos, pero cuando los resultados a veces no se dan, es difícil aguantar. Para mí lo básico en Chile es que hay un recambio importante que está llegando, hay que creer en los nuevos chicos que están llegando a la Selección y que le van a dar muchísimo, no tengo duda porque conozco el medio chileno. Sé que van a dar mucho, hay que estar un poco más tranquilos y también adaptarse a los nuevos tiempos, muchas redes sociales, mucha exposición, mucho cuestionamiento, de que no se puede hacer nada porque todo se malinterpreta.
-Hablando de redes sociales, en la ex Twitter se creó en Argentina una cuenta que se llamaba “fandeAued”. ¿Qué sentiste que un fan creara una cuenta así? ¿Alguna vez tuviste la posibilidad de interactuar con él?
La primera época en Racing fue difícil, el proceso me estaba costando, yo no estaba rindiendo como se esperaba de un refuerzo, era difícil darle la vuelta, ya había un murmullo en el hincha de Racing, algo de que yo no era jugador para el club, que no servía... Y bueno, nada, llegó un loco que me empezó a bancar en Twitter y que no era nada mío, ni familiar, ni amigo, nada. Pero se ve que veía algo bueno en mí. Después, en un momento cuando nos tocó ganar en la cancha de Vélez, con un taco que hice y que Lucho Vietto convirtió en gol, ahí empecé a tomar más fuerza y confianza. Cambió de a poco mi imagen en el club y este loco empezó a rockear cada vez más y se generó algo lindo. Charlé con él, le mandé la camiseta, son esas locuras de las redes sociales que en algún momento te ayudan.