Parece ser una tarea sencilla y que al elegir, debería existir cierto consenso. Pero no es así. Pese a que en su historia de 100 años Colo Colo ha tenido grandes y reputados delanteros extranjeros, normalmente la lista se acota cuando el juego es designar a los mejores.
El brasileño Elson Beyruth, y los argentinos Marcelo Barticciotto y Ramón Mané Ponce están siempre en la nómina. Sea cual sea el puesto que se le dé a cada uno, ellos son fijos.
El tema es que de ahí en adelante ya es más complicado hacer un ranking preciso. Todo depende de los criterios que se tomen en cuenta, tal y como dejaron claro los cuatro especialistas a quienes se les pidió hacer la lista de los 10 mejores delanteros extranjeros que ha tenido Colo Colo en sus 100 años de historia: el ex jugador y símbolo de los albos, Carlos Caszely; el ex dirigente del Cacique (1994-2002) Martín Hoces; el historiador de Cedep Sebastián Salinas, autor del libro “Por empuje y coraje: los albos en la época amateur, 1925-1933”, y el periodista y autor del libro “Colo Colo 1973: El equipo que retrasó el golpe”, Luis Urrutia O’Nell, conocido también como Chomsky.
Así, con diversidad de ángulos de visión, la lista comenzó a escribirse…
Lo que mis ojos vieron…
Todos los consultados subrayaron que, a pesar de haber leído o escuchado de algunos nombres, sólo señalarían a jugadores que tuvieron la posibilidad de ver en directo.
Por ello es que nadie puso entre los 10 mejores al peruano César Socarraz, quien jugó en el Colo Colo invicto de 1941 y que convirtió 38 goles entre ese año y 1943, cuando abandonó el club albo cuando se tomó la decisión de “chilenizar” el equipo.

“No poner a Socarraz en una lista de los mejores de la historia parece ser injusto. Yo tuve la fortuna de hablar con un par de compañeros de él en Colo Colo y decían que jugaba muy bien y que, además, era el que más corría”, dijo Sebastián Salinas. “Hay una tendencia siempre de hacer el salto histórico de los grandes ídolos y estrellas de Colo Colo entre David Arellano y Chamaco Valdés, y se pierden nombres no sólo de extranjeros, como César Socarraz, sino que también de chilenos como el Tigre Sorrel, el Rata Rojas, Colo Colo Muñoz o Jorge Robledo”.
Un nombre que es de la década de los ’60 y que genera debate a partir de la óptica de los que lo vieron (todos, excepto Salinas) es el del brasileño Roberto Frojuelo.
Carlos Caszely lo pone en su lista de los 10 mejores por su calidad técnica y el dirigente Martín Hoces también, aunque hace la salvedad de que “sólo su primer año en Colo Colo fue bueno. Al segundo como que se “chilenizó”, le tomaron la mano y no hizo gran diferencia”.
Luis Urrutia, en tanto, lo descarta de plano como integrante de una lista de los mejores. “Frojuelo llegó lesionado y en malas condiciones físicas. Jugaba recostado por la izquierda y nunca voy a olvidar que no le ganó ningún mano a mano al Fifo Eyzaguirre, al Pollo Valentini y a Remigio Avendaño. No da para entrar a la lista de los mejores”.

Urrutia plantea que hay otro caso de un jugador que no llegó en sus mejores condiciones físicas, pese a que está también mencionado por Caszely, Hoces y Salinas: el argentino Mario Rodríguez. “Llegó cojo y con sobrepeso. Le costó adaptarse y le fue mejor cuando se fue a Audax”.
Martín Hoces disiente: “Mario Rodríguez le enseñó a jugar como centrodelantero a Caszely, quien era puntero derecho. Es cierto que era medio guatoncito y que llegó lesionado, como llegaban a Chile casi todos los extranjeros, pero era un crack con la pelota”.
Caszely, por cierto, lo corrobora. “Con Mario hice una gran dupla. Llegó con una rodilla hecha una miseria, pero con la calidad que tenía encaraba y me la daba redondita. Lo pongo en mi lista”.
Finalmente, otro nombre se suma como parte de la historia, aunque no de modo unánime: el argentino Wálter Jiménez. “Mandrake era extraordinario con la pelota, muy técnico”, recuerda Hoces, mientras que Urrutia complementa: “Llegó en 1963 a Colo Colo y Cua Cuá Hormazábal, que estaba con 10 kilos de sobrepeso, tuvo que ponerse en forma para poder jugar. Jiménez cabeceaba muy bien y convertía muchos goles, a pesar de que hoy podríamos decir que, más que delantero, era volante…”
¿Delantero o volante?
Esto último que señala Urrutia extiende más el debate porque todos los encuestados pusieron en su lista de los mejores delanteros a uno o más jugadores que bien podrían estar considerados como mediocampistas.
“No hay que olvidar que en los ’60 aún se jugaba con cuatro delanteros y por eso meto a Jiménez en el lote”, dice el periodista. Ello lo confirma Caszely, señalando que “en mi lista de los mejores sin duda que está el brasileño Elson Beyruth y no su compatriota y gran socio mío, Severino Vasconcelos. Yo jugué con Beyruth cuando él era un cuarto delantero en un 4-2-4, pero con el Vasco ya era la época del 4-3-3 y él era el volante creativo o de enlace por la izquierda”.

“A Vasconcelos yo lo pongo en mi lista, tal como puse a Wálter Jiménez y coloco a Beyruth. Los tres eran atacantes, más allá de las disposiciones tácticas”, dice Hoces.
Sebastián Salinas tiene otra opinión: “Para mí, hay que respetar las denominaciones. Vasconcelos era el 10 de Colo Colo, el creativo, el que era el enlace y que así se juntaba con Caszely. No está en mi lista de delanteros”.
Pero si Vasconcelos provoca diversidad de opiniones, otros dos nombres en la lista de Luis Urrutia, definitivamente hacen estallar el debate: el boliviano Marco Antonio Etcheverry y el argentino Marcelo Espina.
“Para mí, el Diablo es el mejor delantero extranjero que ha tenido Colo Colo. Era extraordinario, se sacaba rivales como si nada. Lo mató la grave lesión que tuvo. Y pongo a Espina porque él llegó a Chile siendo un atacante más que un volante. Así jugaba incluso en la Selección de Argentina. Pongo a Espina, pero antes de que el DT Gustavo Benítez le inventara esa posición al lado del brasileño Emerson”.
“Etcheverry era un crack. Jugaba lindo porque era bueno para la pelota y convertía goles. Eso es lo que se espera de un atacante”, refuerza Martín Hoces.
Que sí, que no…
Hay jugadores que, claramente, sorprendieron en la lista elaborada por los encuestados.
Sebastián Salinas pone al puntero izquierdo argentino Horacio Simaldone, porque “fue parte de una delantera goleadora y campeona con Juan Rápido Rojas y Caszely”. Urrutia, en tanto, disiente. “Simaldone fue figura en Unión Española. En Colo Colo le pesó la camiseta. No hay que olvidar que cuando asumió Arturo Salah como técnico, fue uno de los primeros cortados”.
Otro de los que fue nombrado sólo por dos -Caszely y Hoces- fue el puntero argentino René Orlando Houseman, lo que no deja de ser curioso en el caso del Chino, quien criticó públicamente en su momento la contratación del campeón del mundo 1978. “El Loco era un crack con la pelota en sus pies”, dice hoy Caszely, mientras que Hoces aporta que “Houseman, carreteado y todo como llegó a Colo Colo, fue un espectáculo. Un pichanguero de lujo”.
La gran sorpresa
Así como aparecieron nombres que generaron división de opiniones, hubo uno que quizás, sorpresivamente, fue nombrado por todos: el argentino Ricardo Mariano Dabrowski.
“Me quedo con el hecho de que cada vez que entraba, era letal. Un grandote que iba con todo y que debe tener un alto porcentaje de goles en relación a los minutos que jugaba”, señala Martín Hoces.
“Obvio que técnicamente no era muy bueno, salvo en el cabezazo, pero era oportunista y convertía, que es lo que se le exige a un delantero”, refuerza Caszely.
Para Luis Urrutia, el Polaco era un jugador inteligente, táctico y que tenía mucha disposición a colaborar en la defensa. “Su cabezazo defensivo era extraordinario”.

Sebastián Salinas es más pragmático. “Dabrowski fue el goleador de Colo Colo en la Copa Libertadores 1991, pese a no haber jugado ni en las semifinales ni en las finales. Eso lo pone en la historia”.
¿Goles? ¿Títulos? ¿Campañas?
Un aspecto interesante en la discusión sobre los mejores delanteros es justamente, qué criterios son los que prevalecen en la discusión al elegir a los mejores delanteros extranjeros: ¿La cantidad de goles que hizo? ¿Los títulos que ganó con el club? ¿Las campañas a lo largo de cierto período?
El argentino Ramón Héctor Mané Ponce, mencionado por todos, por ejemplo, no era un goleador de fuste y sólo logró un título (1979) en los cinco años que estuvo en Colo Colo. “Pero Mané era un crack como puntero derecho. Más que centros, metía pases. Era un lujo jugar con él”, dice Carlos Caszely.
“Mané Ponce era de esos jugadores argentinos que parecía imposible que jugara en Chile en ese tiempo. Como el Tano Novello en Unión Española. Los dos habían sido campeones con Boca Juniors y eran un espectáculo”, recuerda Martín Hoces.

Sebastián Salinas, en tanto, remece la discusión al poner en su lista a tres nombres que casi nadie mencionó: el argentino Ezequiel Miralles y los uruguayos Heber Revetria y Gustavo Bizcayzacú.
“Para mí, un criterio de elección es lo decisivo que resultaron en la obtención de algún título en Colo Colo. Miralles fue el gran socio de Esteban Paredes en el Clausura 2009, Revetria hizo una final de lujo del torneo 1986 ante Palestino, y Biscayzacú fue vital en 2007”.
Salinas, siguiendo ese criterio, no incluye al argentino Juan Martín Lucero (“es un error, pero tiene explicación por su mala salida del club”) pero sí lo hace el periodista Luis Urrutia. “Guardando las proporciones, Lucero fue el Benzemá del Colo Colo de (Gustavo) Quinteros en 2022. Era goleador, pero jugaba para el equipo”.
Salinas y Urrutia incorporan también en su lista al argentino-paraguayo Lucas Barrios, pero Caszely y Hoces no. “Hizo buenos partidos, fue campeón y goleador, pero no está a la altura de cracks como otros que trascendieron”, comenta el Chino.
“A mí me queda más en el recuerdo ese gol que le hace a la U que otras situaciones. De hecho, su regreso a Colo Colo no fue lo esperado”, añade Hoces.
Los dos mejores
Al final, sumando y restando, poniendo en la balanza cada opinión y dejando en claro que las diferencias de criterio pesan, hay dos jugadores que mandan en la lista de los mejores delanteros extranjeros: el argentino Marcelo Barticciotto y el brasileño Elson Beyruth.
Para Carlos Caszely, “Marcelo Pablo Barticciotto se convirtió en un símbolo del club y eso lo hace trascender”. Para Luis Urrutia, “Barti llegó y se hizo como jugador en Colo Colo. Se ganó el cariño de la hinchada”. Para Martín Hoces, “lo que representa Barticciotto hoy en Colo Colo es la demostración de la huella que dejó”. Para Sebastián Salinas, “hay que hacer notar todas las instancias que Barticiotto vivió en el club: el primer tricampeonato de la historia, la Copa Libertadores, la Copa Interamericana y la Recopa Sudamericana, Colo Colo campeón en la quiebra”.
El brasileño Beyruth también recibe elogios unánimes. Para Caszely, “brillante, un jugadorazo”. Para Urrutia, “un jugador con talento de volante creativo que era un cuarto atacante feroz”. Para Salinas, “un jugador que trascendió y que se ganó el cariño eterno de los hinchas de Colo Colo. Para Hoces, “un crack de esos que ya no se ven”.
Un cierre de encuesta. Un punto de partida para seguir discutiendo…