Giancarlo Petaccia es uno de los invitados del nuevo capítulo de “Podemos Hablar”, en donde el exanimador compartirá noche con Paola Troncoso, Fran García-Huidobro y Jordi Castell. El coach de salud relatará el difícil momento que vivió al tratar de salir de Miami para visitar a su madre, quien estaba enferma en Chile.
Según un adelanto al que tuvo acceso TiempoX, el chileno comentará: “Yo estaba haciendo los trámites para obtener mis papeles en Estados Unidos y un día me llamó mi hermana, para decirme que mi mamá estaba grave, así que tuve que ir a la oficina de migración para intentar conseguir un permiso para poder salir del país”.
Posteriormente, señalará que no fue atendido: “Llegué a la oficina y me dijeron que no me atenderían sin cita previa, fui llorando donde un guardia y me dijo que llamase todo el día, y eso hice. Me contestaron y me dan hora para el día siguiente, lleve todos los certificados de mi mamá y me dicen que no me pueden ayudar, no les importó el llanto ni nada, ahí te das cuenta que allá eres un número más”.
“Me fui a la casa y volví a llamar todo el día, y en esta segunda oportunidad me dejaron salir del país. Pude viajar y despedirme de mi madre”, sentenciará Giancarlo Petaccia en “Podemos Hablar”.
La aterradora situación que vivió Giancarlo Petaccia en Estados Unidos
En el mismo episodio, Giancarlo Petaccia confesará que vivió un difícil momento con la policía en Estados Unidos.
“Eran como las 4 de la mañana y nos despertamos porque alguien gritaba y le pegaba a nuestra puerta. Se escuchaba a una persona agresiva, yo no sabía qué hacer, preocupado por mi familia, olvídate. Los niños lloraban, mi señora también, y por el ojo de la puerta veo solo una cara. Nunca vi si estaba con algún arma o algo, no podía llegar y abrir”, comenzará explicando el exanimador en “Podemos Hablar”.
“Llamé al 911. Pasan 4 minutos y la operadora me dice que abra la puerta porque ya habían llegado, en ese momento tengo 5 puntos rojos apuntándome, te juro que nunca había temido tanto, entran los policías armados con fusiles de alto calibre, revisaron todo el departamento y el perímetro y me dicen que no hay nadie”, agregará.
Finalmente, Giancarlo Petaccia confesará en “Podemos Hablar” que todo fue un susto: “A mí esa cara no se me olvidó nunca y 2 días después en la piscina de mi edificio veo una cara igual, así que me acerco y le pregunté si vivía aquí, y me dijo que era del 106, que era el departamento que estaba arriba del mío, lo que paso es que el tipo borracho se había equivocado de puerta”.