Peñarol luchó, pero no alcanzó. El cuadro uruguayo, que en su momento estuvo 2-0 arriba en el marcador, venció 3-1 a Botafogo, aunque no fue suficiente para instalarse en la final de la Copa Libertadores luego de haber perdido 5-0 en la ida disputada en Brasil.
Thiago Almada, autor del único tanto del Fogao, sentenció las ilusiones de los Carboneros al convertir en el minuto 88 y metió a su equipo entre los dos mejores del torneo continental, donde se medirán frente a Atlético Mineiro, que dejó en el camino a River Plate.