Bienestar

¿Por qué dan calambres en la noche?

Si a ti también te han despertado esos dolorosos espasmos musculares, esto es para ti.

No más calambres. Toma magnesio para evitarlos (Foto: Freepik).

Los calambres nocturnos, esos dolorosos espasmos musculares que pueden interrumpir el sueño, son una experiencia incómoda y frustrante para muchas personas.

Aunque no son exclusivos de un grupo en particular, son más comunes en adultos mayores y atletas. Estos episodios de contracción muscular intensa y repentina pueden deberse a diversas razones, pero entender sus causas y adoptar medidas preventivas puede marcar la diferencia en la calidad del sueño y el bienestar general.

¿Por qué ocurren los calambres nocturnos?

Deshidratación: La falta de hidratación adecuada puede conducir a una alteración en el equilibrio de electrolitos en el cuerpo, como el sodio y el potasio, lo que aumenta el riesgo.

Deficiencia de Minerales: La carencia de minerales como el potasio, el calcio y el magnesio puede influir en la excitabilidad de los músculos y propiciar los calambres.

Actividad Física Intensa: La fatiga muscular causada por el ejercicio vigoroso puede provocar calambres nocturnos, ya que los músculos pueden estar más propensos a la contracción involuntaria.

Mala Circulación: Problemas de circulación sanguínea, especialmente en las extremidades, pueden generarlos en la noche.

mujer acostada sin poder dormir
Es muy común que en la noche te despierten estos espasmos dolorosos (Foto: Pexels).

Medicamentos: Algunos medicamentos, como diuréticos y estatinas, pueden tener calambres nocturnos como efecto secundario.

Condiciones de Salud Subyacentes: Enfermedades como la diabetes y trastornos neurológicos pueden aumentar la probabilidad de experimentarlos.

¿Cómo prevenir los calambres?

Hidratación: Mantén una adecuada ingesta de agua a lo largo del día para mantener el equilibrio de electrolitos.

Consumo de Minerales: Incluye en tu dieta alimentos ricos en potasio, calcio y magnesio, como plátanos, espinacas, almendras y yogur.

Estiramientos: Realiza estiramientos suaves antes de dormir para relajar los músculos y mejorar la circulación.

Masajes: Masajear las áreas propensas puede ayudar a aliviar la tensión muscular.

Ropa y Calzado Cómodos: Usa ropa y calzado cómodos que no restrinjan la circulación.

Ducha Caliente: Tomar una ducha caliente antes de acostarte puede relajar los músculos y reducir la probabilidad de que te den.

Moderación en el Ejercicio: Evita ejercicios intensos cerca de la hora de dormir y asegúrate de hacer un buen enfriamiento después del ejercicio.

Mantén una Buena Postura: Evita mantener posiciones incómodas o apretadas durante el sueño, ya que pueden provocar calambres.

Los calambres nocturnos pueden ser evitados con pequeños cambios en la rutina diaria y un enfoque en la hidratación y la nutrición adecuadas. Si son frecuentes o graves, es recomendable consultar a un profesional de la salud para descartar condiciones médicas subyacentes y obtener orientación específica. Tomar medidas preventivas puede contribuir a disfrutar de un sueño reparador y libre de interrupciones.



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