Un verdadero drama es el que atraviesa el buque Saltoro, perteneciente a la compañía Maersk, varado en aguas asiáticas desde hace casi 20 días. En él hay 1.363 contenedores con casi 5 millones de cajas de cereza chilena, fruta por excelencia que agrupa gran parte de las exportaciones de nuestro país.
Su destino es el puerto de Nansha, en China, lugar hacia el que zarpó el 27 de diciembre y al que debía arribar el 17 de enero. Los planes, no obstante, se vieron frustrados por una falla en el motor que mantiene en riesgo a toda la producción allí almacenada.
Hay 115 millones de dólares en riesgo por embarcación varada con la fruta chilena
El valor total de la carga es de aproximadamente 115 millones de dólares, inversión que está a riesgo de perderse. De hecho, si sale todo bien, las cajas de cerezas llegarían a China el 9 de febrero; es decir, después del año nuevo chino, época cuando el mercado está más deprimido.
“Es un barco con un volumen muy importante. Vamos a ver qué ocurre porque tenemos que ver bien cuál es la calidad y condición de esta fruta cuando llegue a destino, dado a que los barcos express se demoran 23, 25 días en llegar a China, y este buque ya tiene un retraso de casi 20 días”, dijo el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Antonio Walker.
Según consignó Emol, este advirtió que allí “van productores grandes, medianos y chicos (…) Es una mala noticia. Además, afectará un poco a la fruta que se cosecha en el sur de Chile, porque este barco va a llegar con la fruta que se cosechó en la región de Los Ríos, Los Lagos y Chile chico”.