Durante el último tiempo, WOM se ha enfrentado a complejos escenarios que también afectaron a su economía, encontrándose muy cerca de la quiebra, lo que derivó en la compra de sus acciones tras solicitar su reorganización en Estados Unidos.
De esta forma, y casi a un año de ingresar al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de EE.UU, la empresa de telecomunicaciones estaría lista para sellar el acuerdo de su venta durante esta semana.
Nuevos dueños de WOM tomarían el control esta semana
De acuerdo a lo constatado por el Diario Financiero, con diferentes fuentes que están al tanto del proceso de compra y venta de WOM, la fecha objetivo para que el grupo de acreedores ad hoc (Amundi, BlackRock, Man GLG y Moneda Patria) tome el control de la empresa es este viernes 21 de marzo.

A través de este, y según estipula el programa y las transacciones de reestructuración, WOM se beneficiará de un balance sólido tras una oferta de derechos de $500 millones de dólares, respaldada por el consorcio y una reducción neta de su deuda financiera por $650 millones de dólares.
Desde DF indican que esta operación, junto con el plan ratificado por el Tribunal de Quiebras de Delaware y aprobado en Chile por la Fiscalía Nacional Económica (FNE), contempla una serie de movimientos societarios, emisiones de nuevos bonos en EEUU, una nueva matriz en las islas Caimán y un fondo de inversión domiciliado en Chile.
El camino para saldar las deudas de WOM
El día que se haga la toma de control de WOM, y con el fin de lograr eliminar las deudas que aún mantiene, también se van a emitir dos nuevos bonos de la compañía, los que están destinados para los acreedores y los métodos de compensación que estos elijan.
“La colocación de estos títulos de deuda estaría siendo liderada por el banco de inversión y asesor financiero de la compañía en el proceso de Capítulo 11, Rothschild & Co, y se realizará en EEUU” indicaron desde DF.
Junto con esto, se contempla el pago en efectivo del financiamiento DIP (Debtor-in-Possession) otorgado por el banco JPMorgan Chase, correspondiente a $210 millones de dólares, los que fueron retirados en su totalidad por la compañía para el proceso.