Las mascotas en Chile han ido tomando un rol bastante importante en los hogares, siendo considerados un miembro más de la familia. De acuerdo a un estudio realizado por la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo, hay 12.482.679 perros y gatos en el país que tienen dueños, reflejando la alta tendencia que hay en los hogares de tener un animal de compañía. Así, la adopción es la forma en la que gran parte de estos animales son adquiridos.
Tomar la decisión de sumar un integrante peludo a tu casa no es algo que deba hacerse de un momento a otro, ya que su incorporación significa gastos en comida, veterinarios y accesorios. Sin embargo, tener un perro o gato en casa también significa una serie de beneficios para todos en la familia.
Así lo explica Paula Pérez Bengoa, psicóloga de la Dirección de Asuntos Estudiantiles del IP-CFT Santo Tomás Santiago Centro. “Adoptar una mascota es abrirle la puerta al amor incondicional, al cuidado mutuo y a una vida cotidiana más rica en emociones, salud y conexión”, agregando además que esto es un “pequeño gesto que transforma vidas: la del animal y la nuestra”.
¿Cuáles son los beneficios de adoptar una mascota?
Según explica la psicóloga, existen diversos estudios que respaldan los beneficios de incorporar un animal al hogar y convertirlo en parte de la familia. “Las mascotas brindan compañía constante, reducen el estrés y mejoran la salud cardiovascular” indica, agregando que estos fortalecen el sentido de propósito y responsabilidad.
Tener un perro, gato, u otro tipo de compañero peludo va a aportar estructura, compañía y alegría en el día a día; actuando además como reguladores emocionales, ya que “disminuyen los niveles de cortisol (la hormona del estrés) y reducen la ansiedad y la depresión”
“También fomentan la interacción social y el sentido de apoyo dentro de la comunidad: los paseos, las visitas al veterinario o los espacios compartidos facilitan el encuentro entre personas cuidadoras” agrega la psicóloga Paula Pérez Bengoa.
Sumando que “en contextos de soledad o crisis, la presencia de una mascota puede ser especialmente reconfortante. Además, hay evidencia de que ayudan a niños con autismo o TDAH a desarrollar habilidades emocionales y sociales”.
También ayudan a quienes tienen una vida más sedentaria
Un estudio realizado por Manpower Group reveló que un 54% de las y los trabajadores chilenos no realiza actividades recreativas o algún deporte fuera de su horario laboral; y la última Encuesta Nacional de Salud realizada por el Ministerio de Salud reveló que el 86,7% de la población se declaró sedentaria.
Tras la pandemia del Covid-19, fueron diversas las empresas que se adaptaron para seguir funcionando durante la emergencia a través del teletrabajo, lo que también significó un aumento en las personas que trabajan hasta más de ocho horas sentadas frente a un computador.
Incorporar un perro o gato al hogar permitirá que quienes se han acostumbrado a una vida más sedentaria puedan salir de este ritmo que perjudica su salud. “Tener una mascota motiva a incorporar actividad física diaria, como caminatas, juegos al aire libre o simplemente más movimiento dentro del hogar” indicó la psicóloga.
“Además, el simple acto de acariciar a un animal reduce el cortisol y aumenta la oxitocina, promoviendo estados de calma, conexión y bienestar emocional” agregó.
Sumado a esto, un estudio publicado en la revista Circulation de la American Heart Association, reveló que los dueños de perros presentan un 24 % menos de riesgo de mortalidad por cualquier causa y un 31 % menos de riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular.
Los beneficios de adoptar para los más pequeños del hogar
Si bien la decisión de adoptar una mascota significa que habrá que hacer más gastos y tener una responsabilidad extra en el hogar, también puede traer grandes beneficios para quienes tienen hijos.
La psicóloga del CFT Santo Tomás Santiago Centro, explicó cuatro puntos clave en los que un animal de compañía es beneficioso para niños y jóvenes:
- Fomenta la empatía y la responsabilidad: Al cuidar de un ser vivo, niños y jóvenes desarrollan habilidades socioemocionales clave, como la compasión, el compromiso y el cuidado hacia otros.
- Fortalece la autoestima: El vínculo con una mascota puede aumentar la seguridad emocional y reducir sentimientos de soledad o ansiedad.
- Promueve hábitos saludables: Salir a pasear o jugar con los animales implica movimiento, estructura y rutinas que favorecen el desarrollo físico y emocional.
- Favorece el manejo de la pérdida: Los animales domésticos suelen tener una vida más corta que los humanos. Acompañar estos procesos prepara a niños y adolescentes para enfrentar la pérdida como parte natural de la vida, desarrollando recursos emocionales valiosos.
